Que las finales son partidos distintos es algo que nadie puede negar. Lo difícil es pensar que en un partido de cincuenta minutos pueden pasar tantas cosas, y peor  si el resultado fue 0-0. Pero la definición de la “A” de fútbol 6 de los viernes fue un verdadero partidazo. El encuentro venía muy parejo y daba la sensación de que cualquiera podía abrir el marcador y chances no faltaron, hasta que la expulsión de Ariel Marsili cambió todo. No por ello se dejó superar Napolitanos, aunque desde ya que tuvo que cambiar su plan de juego.

Durante los primeros minutos los equipos se turnaban para atacar. Alguna chance con más claridad que otra, pero por cada llegada de un equipo, luego venía una del otro.  Marcelo Gallo, goleador del torneo, tuvo la primera clara Napolitanos, y Bruno Carosella respondió con un tiro que pegó en el palo, en una de las más riesgosas del partido. Los de naranja tuvieron otras dos muy claras que tras desviarse en defensores, descolocaron al arquero y salieron cerca.

 Leonardo Giménez aguantaba bien arriba para Lo Que Quieras y comenzó a trenzarse con los defensores rivales. Primero provocó la amarilla para Exequiel Marsili y poco después la expulsión de Ariel. La tensión se apoderó de ambos equipos, que ya jugaban con mucho nerviosismo. Mariano Castellón debió salir por un problema en su tobillo, víctima del roce con el cual se estaba jugando. La primera mitad terminó con más quejas que fútbol.

Con los ánimos ya calmados, la segunda parte fue más estratégica que tensa. Lo Que Quieras manejaba con calma las acciones, a la espera de que se abrieran los espacios y así aprovechar la ventaja numérica. Napolitanos esperaba con Patricio Stahl como estandarte de la resistencia y lograba generar peligro cuando la pelota le llegaba a Gallo arriba. Las más peligrosas las tuvo Leonardo Giménez, que en dos ocasiones la tuvo a su merced, pero que se encontró con un arquero casi imbatible.  Andres Casal ,de Lo Que Quieras, también salió lesionado.

El partido se esfumó sin goles, y la suerte del campeón se definiría en los penales. David Rizzo, dueño de la defensa naranja, y el encargado de llevar tranquilidad a sus compañeros en los momentos de mayor tensión, se hizo cargo del primer penal y no falló. En el primer punto de la serie, pero para Napolitanos, Juan Elia estrelló su penal al palo. Esto terminaría por ser definitivo ya que el resto de los tiros fueron a parar a la red, y tras la ejecución de Mariano Hernanes, Lo Que Quieras pudo gritar bicampeón.