Por Roi Waremkraut

Furano fue uno de los animadores del Torneo Apertura, pero cayó en las semifinales y tuvo que conformarse con el tercer puesto. Volvió con sed de revancha a jugar el Clausura y pasadas cuatro fechas se ubica en el quinto puesto con 9 puntos sobre 12 disputados. En la última jornada le tocó enfrentar a Pisalo y lo venció 7-2.

El equipo celeste se puso en ventaja rápidamente al minuto de juego a través de su número diez, Diego Conduchi, que aprovechó una mala salida del equipo rival y no perdonó. Pisalo mostró intenciones de jugar por abajo en todo momento y lo hizo bastante bien. Se adueñó de la pelota en muchos pasajes del partido, aunque le costó generar situaciones, mientras que Furano lograba llegar con peligro de contragolpe.

Conduchi metió el segundo a los siete minutos y Furano pasó a controlar el juego desde el orden defensivo y la tranquilidad que le dio el resultado. El equipo rojo empezó a presionar más arriba a partir de los 15 minutos y logró el descuento, pero Conduchi estaba en su noche y puso el 3-1 antes del entretiempo.

Los celestes no quisieron arriesgar nada en el complemento y definieron el asunto desde el inicio con goles de David Butteri y Juan Pablo Franchini. Pisalo no se dio por vencido a pesar de los cuatro goles de diferencia, volvió a descontar rápidamente y asumió la responsabilidad del partido para buscar la hazaña. La defensa bien parada de Furano mermó las esperanzas de su rival y dos goles sobre el final del partido sellaron el 7-2 definitivo.