Por Roi Waremkraut

¿Cómo viste el partido?

Fue complicado. Habíamos empatado los dos partidos que habíamos jugado contra ellos, así que sabíamos que iba a ser un partido trabado. Pero sabíamos también que si hacíamos nuestro juego lo íbamos a sacar adelante, porque demostramos ser los mejores durante todo el torneo. Este campeonato fue un premio para todos nosotros.

Dominaron la mayor parte del partido pero sufrieron al final por no haberlo definido antes.

Sí, nos costó eso en los últimos partidos. Los rivales te van conociendo y se meten atrás. Es cuestión de estar precisos en los pases y meter las que tenemos. Tuve la suerte de que me quedaran tres o cuatro jugadas y pude meter dos. Por suerte sirvió para la ventaja y el campeonato.

¿Cuál  fue la clave del campeón?

El compromiso, la entrega y el compañerismo. Eso lo sintieron los rivales y nosotros también adentro de la cancha. Por eso logramos el título.

¿Cuál es el futuro de Baradero?

Por el momento, festejar. Vamos a despedir bien el año y después ver si seguimos en el torneo. Vamos a ver también quién se queda y quién se va, porque como somos el interior, a muchos se les complica jugar.

¿Son todos de Baradero?

Sí, el que organizó el equipo es de allá y la mayoría de los jugadores también. Hay algunos amigos que se sumaron para completar.

¿Cómo viste tu actuación?

Me sentí bien. Venía de un desgarro que había sufrido en los cuartos de final y me pude recuperar bien con kinesiología para llegar a la final. Los centrales rivales eran grandotes y eso hizo que el partido fuera más luchado, pero intenté hacer mi juego que es estar adentro del área y patear al arco sin pensar cuando me queda una pelota. De esa manera me siento cómodo y hoy se me pudo abrir el arco para festejar.